En Cinco Palabras Puede que parezcan lo mismo, pero no tienen nada que ver. Ultimamente me he dado cuenta de que prefiero las películas a las series. Si sigues el blog regularmente, habrás notado que los últimos post son todos sobre películas. Es algo que me ha hecho pensar. Reconozco que siento una mayor predilección por ellas. A ver. Me gusta que las cosas tengan un principio y un final. Me refiero a que no te trocean el argumento en cómodas dosis de 20 o 40 minutos hasta el infinito y más allá. Seguramente sea este punto el que me baila. Para que me anime a empezar una serie, tiene que estar acabada. Pero no me refiero a que la hayan estirado hasta agotar el filón. Sino a que desde el principio, se trate de una historia con final. Por desgracia lo que suele suceder es que graban un capítulo piloto, luego ruedan una temporada, si gusta, graban otra y otra... De tal manera que la historia nunca queda cerrada. Siempre al gusto de la productora. Por culpa de ello, la calidad ...